Un cooperante de Médicos Sin Fronteras protegido con el equipo de protección en el centro de tratamiento de la ONG en Monrrovia (Liberia). Foto: Médicos Sin Fronteras
Un cooperante de Médicos Sin Fronteras protegido con el equipo de protección en el centro de tratamiento de la ONG en Monrrovia (Liberia). Foto: Médicos Sin Fronteras