Cerca de mil millones de personas padecen hipertensión en todo el mundo. Los especialistas alertan sobre la insatisfacción de los pacientes europeos con el tratamiento clínico de su enfermedad cardiológica.

Expertos reunidos en el congreso anual de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC), que se celebra en Alemania, coincidieron en la necesidad de nuevas terapias y estrategias frente a la hipertensión arterial y la fibrilación auricular (FA) en Europa.
La principal conclusión de la Encuesta a Pacientes Europeos sobre Fibrilación Auricular (EUPS-AF) alude a la necesidad de mejorar la comunicación con el paciente con esa afección, causante de entre el 15 y el 20 % de los ictus isquémicos.
“Hipertensión y fibrilación auricular son dos enfermedades crónicas con un manejo complicado que requieren un alto nivel de compromiso por parte del paciente”, señaló en Múnich Florian Abel, director del departamento médico en Europa de Daiichi Sankyo, compañía encargada del estudio.
Según el experto, “la encuesta EUPS-AF muestra que el actual nivel de satisfacción de los pacientes con FA respecto a su tratamiento no es el óptimo y, de igual modo, las tasas de control de la hipertensión arterial no son las adecuadas a pesar de las diferentes opciones de tratamiento disponibles”.
Pacientes interactivos
Para el jefe del servicio de cardiología del Hospital Ramón y Cajal de Madrid, José Luis Zamorano, la encuesta revela que “existen limitaciones en las actuales terapias anticoagulantes debido a la necesidad de una monitorización y ajuste de la dosis constantes, con la consecuente carga que esto supone para el paciente”.
En este sentido, subrayó que “adaptar la asistencia sanitaria a lo que requieren los pacientes es fundamental para mejorar su atención y su bienestar a largo plazo”.
Según la encuesta, en la que participaron 1.507 pacientes de España, Alemania, Francia, Italia y el Reino Unido, las personas que padecen FA desearían recibir una mayor educación y un mayor conocimiento y poder de decisión para manejar de forma efectiva su enfermedad.
“El tipo de pacientes hipertensos que supone más coste para los sistemas de salud es el que recibe un tratamiento inadecuado o el que no recibe ninguno”, señaló el director del departamento de ciencia cardiovascular y torácica del Hospital Sant Andrea de Roma (Italia) y presidente de la Sociedad Italiana de Hipertensión, Massimo Volpe.
Para Volpe, “en hipertensión es clave un buen cumplimiento terapéutico y un inicio temprano de la terapia y hay que hacer especial hincapié en estos puntos para reducir la mortalidad cardiovascular y los costes asociados a largo plazo”.
La Organización Mundial de la Salud estima que unos mil millones de personas en todo el mundo padecen hipertensión y sólo en España se calcula que hay unos 15 millones de hipertensos.