Alrededor de 300.000 niños y niñas padecen en España problemas crónicos de dolor y su tratamiento es una “asignatura pendiente” del Sistema Nacional de Salud (SNS). III Jornada Nacional sobre el Dolor Infantil celebrada la pasada semana en el hospital universitario La Paz de Madrid

Dolor crónico infantil, asignatura pendiente de la Sanidad
EFE/Miguel Gutiérrez
  • 5 de febrero, 2019
  • MADRID/EFE/REDACCIÓN SALUD

Los datos han sido explicados a Efe por el director de la Cátedra Dolor Infantil de la Universidad Rovira i Virgili – Fundación Grünenthal, Jordi Miró, quien ha denunciado que el Ministerio de Sanidad no ha dedicado “ni un solo euro” en los últimos cinco años a proyectos de dolor infantil .

“Es para ponerse a temblar” ha lamentado el también coordinador del Grupo de Trabajo de Dolor Infantil de la Sociedad Española de Dolor (SED), tras participar en esta III Jornada, celebrada en el hospital universitario La Paz.

Miró ha expuesto que el dolor agudo en niños está más o menos controlado, ya que hay recursos y fármacos que funcionan razonablemente bien. “Pero el gran problema lo tenemos en el dolor crónico, que es un dolor que no se ha resuelto satisfactoriamente y se mantiene a lo largo del tiempo”, añade.

Este dolor crónico puede estar asociado a enfermedades de larga duración como las enfermedades reumáticas u oncológicas, pero hay otro tipo de dolor, que es el dolor primario y que “en muchas ocasiones no sabemos por qué aparece, ni por qué se mantiene en el tiempo, simplemente está”.

Sin planes específicos para el dolor crónico

Según las encuestas, en España el 37 % de la población infanto-juvenil tiene problemas crónicos de dolor y un 6 % serios problemas de discapacidad asociados al dolor, lo que se traduce en 300.000 niños y niñas con este grave problema.

“Esto convive con una situación en la que no existen programas específicos diseñados para el dolor crónico infantil. Es muy difícil atender la demanda de esta población”, ha lamentado.

Por eso, Miró ha reclamado “sensibilizar, formar y construir estructuras que nos permiten dar atención a estos niños”, una mejor formación de pediatras y médicos de Atención Primaria en dolor infantil e investigación.

En la misma línea se ha manifestado el presidente de la SED, Juan Antonio Micó, quien ha considerado que el problema está en que no tenemos un marco nacional para el tratamiento del dolor infantil y ha pedido que en el plan de cronicidad del Ministerio de Sanidad se incluya un apartado para la atención adecuada de esta patología.

Ha señalado que el número de unidades de dolor infantil especifica en España es escaso, entre cinco y seis, por lo que ha reclamado centros especializados y estudios epidemiológicos nacionales.

También el coordinador médico de la Unidad de Dolor Pediátrico del hospital La Paz, Francisco Reinoso- Barbero, ha afirmado que el dolor crónico en niños no está siendo tratado en España con una medicina basada en la evidencia.

Y eso a pesar de que no es un tratamiento ni tecnológica ni económicamente costoso, ha alegado, sino simplemente “organizativo político”. “Que se organicen las bases para que este tratamiento multidisciplinar  esté disponible en varios hospitales,  implicando a diferentes especialidades  y servicios”.

Algo que, para Reinoso-Barbero, en España choca mucho con las estructuras de los hospitales donde cada especialidad hace su tratamiento y es “muy difícil trabajar de forma transversal y que un paciente se beneficie de todos los servicios a la vez”.

Reinosa-Barbero ha coincidido en la principal causa de dolor en niños es el dolor crónico primario, “es decir, que no somos capaces de saber qué lo origina”. “A lo mejor fue un golpe, una inflamación, algo que se quedó en el sistema nervioso central y que el niño lo vive con dolor y sin embargo no somos capaces de ver una enfermedad detrás”.

Esto se manifiesta en un empeoramiento de la calidad de vida del menor, que se encuentra decaído, no juega, que tiene problemas sociales en el colegio, en la familia, con baja autoestima, etc.