Los investigadores contra el cáncer reclaman más ensayos clínicos independientes en España, donde más del 80 por ciento son financiados por las farmacéuticas, algo que no ocurre en otros países, donde la mayoría son iniciados directamente por los propios científicos

Investigadores reclaman más ensayos clínicos independientes contra el cáncer

Investigadores reclaman más ensayos clínicos independientes contra el cáncer

  • 12 de abril, 2019
  • Javier Tovar

La presidenta de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), Ruth Vera, señaló que la situación de los ensayos clínicos es uno de los grandes problemas a los que están teniendo que hacer frente los investigadores, que siguen pidiendo a la administración más implicación y financiación.

“Las cifras reflejan la situación, y aunque es cierto que cada país tiene sus circunstancias y no es del todo justo compararlos”, mientras Francia dedicó 120 millones de euros entre 2012 y 2017 a la promoción de ensayos clínicos independientes, España invirtió 300.000 euros, lamentó Vera.

Esta situación debe cambiar, reclamó, porque la investigación mediante ensayos clínicos, además de aumentar las posibilidades de tratamientos para los pacientes, supone un ahorro importante para el Sistema Nacional de Salud”.

Ruth Vera hizo estas apreciaciones en una rueda de prensa con motivo del Día de la Innovación en Cáncer, en la que también participó el presidente de la Asociación Española de Investigación sobre Cáncer (ASEICA), Xosé Bustelo.

Ambos responsables han recordado que desde que un laboratorio de investigación básica hace un descubrimiento -como identificar una diana terapéutica o desarrollar un inhibidor molecular- hasta que se convierte en un nuevo tratamiento para los pacientes, hay que esperar diez o quince años.

ensayos clinicos
El doctor Bustelo y la doctora Vera informan de la investigación contra el cáncer en el Día de la Innovación contra esta patología/Foto facilitada por SEOM y ASEICA

Ese tiempo es “insoslayable” para muchos pacientes, pero existe “un margen de mejora” para reducir los tiempos en cada momento del proceso, desde identificar dianas con datos de genómica de cáncer o identificar nuevas combinaciones de dianas terapéuticas (en la investigación básica), hasta identificar los mejores protocolos químicos de tratamiento y los grupos de pacientes de los ensayos clínicos (investigación clínica).

Pero ningún avance será útil si el Gobierno no pone los recursos necesarios para ayudar a los grupos de investigación que “sufren el síndrome de Fernando Alonso -ha dicho Bustelo-, que son grandes profesionales pero tienen el chasis en mal estado”.

Solucionar su situación empieza por “aumentar la financiación en I+D+i, que actualmente solo recibe el 1,2 % del PIB, frente a otros países como Suecia, Austria o Dinamarca que invierten cerca del 3,3 por ciento.

España está al nivel de países como Polonia o Portugal.

Bustelo subrayó que la tasa de supervivencia de los pacientes con cáncer en España es del 53 %, una cifra que podría situarse en el 70 % en 2030 si la investigación básica y la innovación recibieran más recursos y apoyo del Gobierno.

“El reto de superar ese ‘Tourmalet’ y mejorar la supervivencia sólo será posible con mejores investigaciones, más innovación y sobre todo, si somos capaces de trasladar esa innovación al paciente”, dijo Bustelo.

Además, hace falta más coherencia en las convocatorias de los proyectos de investigación, que actualmente se publican con meses de retraso, y más agilidad en la gestión porque “los científicos seguimos dedicando demasiadas horas a la burocracia”, lamentó.

En cuanto a las patentes que surgen de la investigación, Bustelo recordó que España patenta tres veces menos que Francia, cinco veces menos que el Reino Unido y Alemania, y siete veces menos que Estados Unidos.

Otro aspecto a mejorar es la innovación, ya que de las 400 startups (empresas dedicadas a buscar nuevos modelos de negocio) relacionadas con la biomedicina que hay en Europa, España solo tiene 25, frente a las 129 de Reino Unido o las 51 de Francia.

ASEICA y SEOM han elaborado un vídeo divulgativo en el que explican cómo es el proceso de la investigación desde que arranca en un laboratorio hasta que culmina con la investigación clínica y se convierte en un tratamiento para los pacientes con cáncer.