¿Qué pasaría si llegaras a un hospital y no hubiera nadie para atenderte? Quizás tuvieras que atenderte tú solo. ¿Y si vienes de parto? También. Máquinas expendedoras de suero o anestesia y un conjunto de cables monitorizarían tu estado. Estas son algunas de las herramientas que se reflejan en el hospital que recrea “La Buena Fe” un cortometraje preseleccionado a los Goya 2016. ¿Estamos tan cerca de la deshumanización hospitalaria?

“ La Buena Fe ”: una visión apocalíptica de la sanidad
Fotogramas de “La Buena Fe”. Cedidas por la organización del cortometraje.
  • 1 de diciembre, 2015
  • MADRID/EFE/MIRIAM MUÑOZ

Esta situación es la que se plantea en “ La buena Fe ”, un cortometraje preseleccionado para los Goya 2016 que hace una denuncia social mediante la comedia y la ciencia ficción de los duros recortes que ha sufrido la sanidad en los últimos años.

Marisa es una mujer de 35 años que acaba de llegar al hospital para dar a luz y se da cuenta de que no hay nadie en recepción para tomar sus datos para el ingreso, ni médicos que valoren su situación, ni matronas que le ayuden a traer a su bebé al mundo. Tiene que atenderse a sí misma.

La familia de Marisa no se queda al margen de estos hechos. Su madre, sus hermanos y su mejor amiga viven una serie de aventuras en el coche con el que se dirigen al hospital.

 “ La buena Fe ” El cortometraje

Esta es la historia que crea Begoña Soler, la directora de este cortometraje, porque considera que “es el mejor momento para hacer este tipo de cine”.

La idea le surgió a Soler un día que fue a visitar a su abuela al hospital y le costó bastante tiempo encontrar a alguien que le atendiera.

“Es en esos momentos cuando piensas…¿te imaginas que viniera aquí una persona que se encontrase realmente mal? ¿Y si viene una mujer embarazada?”.

Begoña Soler se encontraba escribiendo en esos momentos el guión de otro cortometraje pero al vivir esa experiencia, la nueva idea se apoderó de ella: “Lo que era una llamada furtiva de vez en cuando al hospital comenzó a tomar cuerpo, forma y caras y se convirtió prácticamente en una historia paralela”, detalla.

El objetivo inicial de “ La Buena Fe ” era contar una realidad que estaba viviendo y que no le parecía lógica. Eso sí, “desde un punto de vista muy exagerado”, nos confiesa.

Vivencia hospitalaria

Para conseguir el resultado que quería, optó por la ciencia ficción porque considera que era lo que la historia requería.

De esta manera, Begoña Soler, crea un futuro muy cercano en el que los espectadores pueden llegar a sentir incluso miedo “¡Anda, si ese hospital lo reconozco!, ¡esa familia es como la mía!, ¡ese podría ser mi coche!”.

la buena fe
Cartel del cortometraje. Cedida por la organización.

Aunque todas las vivencias escenificadas en el interior del hospital “tienen un punto muy futurista son una manera de inspirar la realidad y de hacer comedia a la vez”.

Para que la ficción resultase lo más creíble posible, la directora de este corto contó en todo momento con la revisión de su guión por parte de una matrona y dos médicos; su objetivo era acercarse lo máximo posible a cómo sería realmente ese hospital del futuro.

¿Si existiera una máquina matrona cómo sería? Se preguntaba Soler al redactar su guión.

Sobre este aspecto, la matrona le explicó que tendría que tener una forma fálica para que la mujer se lo pudiera introducir y mediante una onda poder ver la dilatación que tenía en cada momento.

Este es uno de los grandes ejemplos que permitieron desarrollar el hospital del futuro en toda su plenitud.

La familia

Otro escenario en el que transcurre la historia es el coche en el que aparecen las personas más cercanas del entorno de la protagonista: su madre, sus hermanos y su mejor amiga.

Los cuatro juntos emprenden un viaje  “urgente” hacia el hospital para acompañar a Marisa en este día tan especial.

Begoña Soler crea cuatro personajes -esperpénticos- encargados de cumplir distintos roles en una situación en la que se muestra “a alguien que está pidiendo ayuda a gritos pero nunca llegan a escucharla”.

La visión de la directora sobre la sanidad española

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La directora del cortometraje en el rodaje. Cedida por su responsable de prensa.

A pesar de la crítica metafórica que se hace en ese cortometraje hacia la sanidad en España, su creadora, afirma que se trata de “un sistema que funciona bien pero que hay que conservarlo y contar con la gente necesaria”.

Desde su propia experiencia detalla que el personal está muy estresado y eso hace que muchas veces se pierda el objetivo final: la humanidad.

Soler no cree que los trabajadores sean los culpables de esta situación porque no se trabaja de igual manera si te encargan atender más habitaciones del tiempo del que dispones.

No obstante, sus vivencias en primera persona le hacen asegurar que también ha vivido una atención y una cobertura estupenda; incluso a nivel domiciliario.

Al final, lo más importante de todo es que el enfermo sienta que alguien está cuidando realmente de él.

” La buena Fe ” ha sido recientemente ganador del premio “Mejor cortometraje español” en la 59 Semana Internacional de Cine de Valladolid (Seminci) y ha participado en más de sesenta festivales y cuenta ya con once premios y tres menciones especiales.

El próximo 14 de diciembre se conocerá si es uno de los cortometrajes nominados a los Premios Goya 2016