Gobierno y comunidades autónomas han decidido dispensar, de momento, la vacuna anticovid de AstraZeneca a las personas entre 60 y 65 años después de que la Agencia Europea del Medicamento (EMA) confirmara un “posible vínculo” de este preparado con los casos inusuales de trombos, aunque considera que su beneficio sigue estando por encima del riesgo de un efecto secundario

España acota, de momento, la vacuna de AstraZeneca al grupo entre 60 y 65 años
Varias personas son vacunadas en el Centro Cultural Miguel Delibes de Valladolid el pasado lunes con la vacuna de AstraZeneca. EFE/R. García

El Consejo Interterritorial de Salud ha decidido esta noche dejar de administrar la vacuna de AstraZeneca (prevista para el grupo de 55 a 65 años) a los menores de 60 años y pone en manos de la Comisión de Salud Pública, mañana, la decisión de ampliar su dispensación hasta los 69 años.

Fuentes cercanas al Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud han informado a Efe de que todas las autonomías se han mostrado a favor de esta propuesta menos Madrid, que ha votado en contra porque era partidaria de ampliar el rango de edad por encima de los 65, mientras que Ceuta y el País Vasco se han abstenido.

En conferencia de prensa tras la reunión del Consejo Interterritorial, la ministra de Sanidad, Carolina Darias, ha repetido que el acuerdo alcanzado es vacunar con AstraZeneca a los mayores a partir de 60 años.

La ministra ha dicho que está por determinar si se da la segunda dosis de AstraZeneca a las personas de 18 a 59 años que han recibido la primera y lo ha circunscrito la decisión al ámbito europeo que estudiará si proporcionar otra vacuna diferente o no dar la segunda dosis ya que solo con la primera ya se alcanza el 70% de eficacia.

Las primeras vacunas de AstraZeneca se comenzaron a inocular la segunda semana de febrero y en pocos días se administraron en España algo más de un millar de dosis al colectivo de personas de entre 18 y 55 años de servicios de emergencia, policías, docentes o personal sociosanitario, pues este era el rango de edad para el que estaba recomendada.

La administración comenzó a ritmo lento, pero ha ido creciendo sustancialmente durante el transcurso de la campaña hasta superar a día de hoy la media de 70.000 sueros diarios, tras ampliarse su cobertura a personas mayores de 55, en concreto de 60 a 65 años.

España tiene contratado con AstraZeneca hasta el momento más de 12 millones de vacunas y ha recibido 3,2 millones de los que ha inoculado 2.1 millones con la primera dosis y solo 97 con la segunda, según datos del 7 de abril del Ministerio de Sanidad.

También ha comparecido en esta conferencia de prensa la directora de la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios, María Jesús Lamas, quien ha explicado que los efectos adversos inusuales como los trombos en los senos venosos o en el abdomen, así como la bajada de plaquetas son una respuesta inmunológica a la vacuna.

En Europa se han notificado 169 casos de trombos cerebrales y 53 en el abdomen entre 34 millones de personas que ha recibido al menos una dosis. En España se han notificado 8 casos cerebrales y 4 en abdomen de 1,7 millones de dosis, casi todo en mujeres menores de 55 años.

La EMA ha comunicado que la mayoría de los casos notificados han ocurrido en mujeres menores de 60 años dentro de los 15 días posteriores a la vacunación.

La titular de Sanidad ha asegurado que a final de agosto se llega al objetivo de vacunar al 70% de la población: en la primera semana de mayo 5 millones de personas, en la primera de junio 10 millones; en la tercera de junio 15 millones; en la cuarta de julio 20 millones y 33 millones, el 70%, a final de agosto.

Además, ha anunciado que a finales de esta semana se recibirán 328.000 dosis de Moderna.

La EMA confirma el posible vínculo entre la vacuna y los trombos

Según las conclusiones alcanzadas hoy por el comité de seguridad (PRAC) de la EMA, los trombos “inusuales” con bajas plaquetas “deben incluirse como efectos secundarios muy raros” de la vacuna de AstraZeneca, en base a “todas las pruebas disponibles actualmente”, incluyendo el asesoramiento de un grupo especial de expertos.

Los expertos de la EMA no han podido identificar un factor de riesgo para estos eventos, como la edad, el sexo o un historial médico previo, aunque una “explicación plausible (a estos casos raros de coagulación sanguínea) es que son una respuesta inmune a la vacuna” en algunas personas, por lo que el PRAC ha solicitado nuevos estudios para tratar de recopilar más información y tomar las medidas adicionales necesarias.

La directora ejecutiva de la EMA, Emer Cooke, subrayó, en una rueda de prensa telemática desde la sede de la agencia en Ámsterdam, que la covid-19 es una “enfermedad muy peligrosa” y las vacunas son “muy importantes para luchar contra la pandemia”, lo que incluye AstraZeneca, que “se ha demostrado altamente efectiva” contra el coronavirus.

“El PRAC ha confirmado que los beneficios de la vacuna de AstraZeneca para prevenir la covid-19 en general superan a los riesgos de efectos secundarios”, añadió Cooke, que reiteró que “tras un análisis en profundidad, se ha llegado a la conclusión de que los casos notificados de coágulos sanguíneos inusuales posteriores a la vacunación deben incluirse como posibles efectos secundarios de la vacuna”.

Al no haber un factor de riesgo definido, la EMA subraya que es “importante que tanto las personas vacunadas como los profesionales de la salud estén al tanto de la posibilidad de que se desarrollen casos muy raros de coagulación sanguínea combinados con niveles bajos de plaquetas en la sangre dentro de las dos semanas posteriores a la vacunación”.

Hasta ahora la mayoría de los casos notificados han ocurrido en mujeres menores de 60 años dentro de los 15 días posteriores a la vacunación.

El PRAC revisó en profundidad un total de 62 casos de trombos cerebrales venosos (CVST, por sus siglas en inglés) y 24 casos de trombosis de la vena esplácnica, notificados hasta el 22 de marzo, de los cuales, 18 fueron mortales.

Reino Unido recomienda otras vacunas para menores de 30 años

El Reino Unido recomienda ofrecer vacunas alternativas a la de Oxford/AstraZeneca a los menores de 30 años, después de que se haya detectado un posible vínculo entre ésta e inusuales trombos en adultos jóvenes, anunció este miércoles el Comité conjunto de vacunación e inmunización (JCVI, en inglés).

Ese grupo de población tendrá la opción de elegir vacunarse con los preparados de Pfizer y Moderna, también aprobados en este país, aunque los reguladores siguen recomendando la vacuna de AstraZeneca en adultos de más edad al considerar que los beneficios compensan los riegos.

La Universidad británica de Oxford ha detenido las pruebas que hace con su vacuna -desarrollada con AstraZeneca- en niños y adolescentes hasta que la agencia reguladora del medicamento del Reino Unido (MHRA) proporcione más información sobre su posible relación con coágulos sanguíneos.