España sigue estando a la cabeza en materia de donación y trasplante de órganos con 40,2 donantes por millón de habitantes frente a los 18,4 de la media de la Unión Europea, además de que 8 de cada 10 familias consiente la donación.

En los cuatro primeros meses de 2022 la donación de de órganos en España ha crecido un 11% con respecto al mismo periodo del año anterior.
A pesar de la pandemia, en 2021 se realizaron en España 4.781 trasplantes, lo que supone un aumento del 8% respecto a la actividad trasplantadora de 2020.
En total, 807 personas han donado órganos: 707 lo han hecho después de fallecer y 100 han donado un riñón o parte de su hígado en vida. Estas personas han permitido realizar 1.740 trasplantes, lo que supone un crecimiento del 10% en comparación con 2021.
Además, se ha adaptado los protocolos de donación y trasplante a la situación pandémica y en los primeros meses de 2022 se han realizado 53 trasplantes de órganos donados por personas con PCR positiva.
Estos datos de la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) se han presentado este martes con motivo del Día Nacional del Donante de Órganos, Células y Tejidos en un acto presidido por la ministra de Sanidad, Carolina Darias.
El “buen samaritano”
El Día Nacional del Donante de Órganos, Células y Tejidos se ha centrado en la figura del “buen samaritano”, aquel que lleva su gesto más allá al donar uno de sus riñones a un desconocido al que nunca podrá conocer.
Desde que se pusiera en marcha esta iniciativa en 2010, 333 personas se han interesado por ella, de las que 285 han sido entrevistadas por personal de la ONT. Andalucía, Cataluña y Madrid son las comunidades que encabezan la lista de solicitudes.
Finalmente han sido 18 los que han completado la evaluación médica y psicosocial con éxito, convirtiéndose en donantes efectivos.
Dos de cada tres buenos samaritanos en nuestro país son hombres, con una media de edad de 48 años, de profesiones muy diferentes y habitualmente sin cargas familiares.
Les acompaña además una larga trayectoria altruista, ya que son también donantes de sangre o de médula ósea, con tarjeta de donante, colaboradores o miembros de ONG.
Cada uno de estos donantes permite realizar tres trasplantes renales. Uno de los 18 “buenos samaritanos” donó directamente a la lista de espera; con los otros se pudieron iniciar otras tantas cadenas de trasplantes cruzados, que han permitido realizar un trasplante renal a 55 pacientes.