Hay tanta información que la sociedad ya no sabe ni qué ni a quién creer. Esta es una de las conclusiones a las que llegaron varios expertos, que han colaborado en el libro ‘La alimentación del siglo XXI: un objetivo común basado en la evidencia científica’, con el objetivo, aseguran, de aclarar informaciones falsas y ser una fuente de información fiable

La sociedad actual tiene demasiada información y no sabe de quién fiarse. Esta es una de las conclusiones a las que llegaron varios expertos hace unos días en la presentación del libro ‘La alimentación del siglo XXI: un objetivo común basado en la evidencia científica‘.
Una iniciativa impulsada por Foro de la Alimentación Qcom.es, también han colaborado Agrifood Comunicación, la Fundación Española de la Nutrición (FEN), la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC), la Sociedad Española de Médicos de Atención Primaria (SEMERGEN) y la Fundación Española del Corazón (FEC).
Desde Foro de la Alimentación, aseguraron que existe una ‘infoxicación’ y una desorientación de la sociedad en cuanto a lo que significa una buena alimentación.
Por ello, especialistas de la nutrición y la salud han trabajado en un libro que recoge “capítulos elaborados por profesionales de reputación internacional, que contiene un análisis exhaustivo de la realidad del sector alimentario actual y del futuro“, explicó el director de Agrifood Comunicación, Ricardo Migueláñez.
Un obra que tiene como objetivo “aclarar informaciones incorrectas sobre alimentación que circulan por la web y que confunden a la sociedad, además de ser una fuente de información y consulta para los profesionales de la comunicación“, afirmaron desde Foro de la Alimentación.
Relación estrecha entre periodismo y alimentación
Muchos profesionales coincidieron durante su intervención en que debe existir una buena relación entre el periodismo y la alimentación, pues “algunas de estas informaciones no están filtradas y, muchas veces, obedecen a intereses”.
El papel del periodismo es, según los especialistas, trabajar con noticias que tengan valor y sean fiables.
“El periodismo es un aliado imprescindible para la educación alimentaria de la población“, aseguró el presidente del Comité Científico de la SENC, Javier Aranceta.
“Es importante -añadió- fijar las bases y las fuentes científicas con las que deben trabajar para que sus noticias tengan valor y sean fiables”.
Información rápida e inmediata
Ahora se lleva la comunicación rápida, como destacó la presidenta de la Asociación de Periodistas Agroalimentarios de España (APAE), Elisa Plumed, donde primero se da la noticia y luego se contrasta.
“Lo que provoca a su vez -añadió- que haya más informadores y menos noticias reales“. Un panorama en el que “los medios de comunicación no es el mismo de hace 30 años”.
Según Plumed, las redes sociales constituyen un nuevo medio de difusión que influye de forma directa en la opinión y, sobre todo, en la decisión de los consumidores.
Por ello, los especialistas instaron a la ciudadanía a ser más responsables y conscientes de dónde se informan.
“Es muy fácil lanzar información falsa y es muy difícil desmentirla”, confirmó José Miguel Mullet, profesor de Biotecnología en la Universitat Politècnica de València.
Por su parte, Vicente Pascual, responsable de Investigación del Grupo de Trabajo de Nutrición de Semergen, insistió en la importancia de la Dieta Mediterránea, “una joya que no debemos perder”.
“La alimentación del siglo XXI tiene que volver a los orígenes, basarse en la alimentación tradicional y preservar la dieta mediterránea, con productos de proximidad que primen la correcta nutrición y que, además, fomenten la lucha contra el impacto ambiental al reducir sus traslados”, argumentó Pascual.
‘Nueva Vida Alimentaria’
Por este motivo, durante la presentación también se dio a conocer un nuevo proyecto en el que han colaborado la Sociedad Española de Nutrición Comunitaria (SENC), Fundación Española de Nutrición (FEN) y la Fundación Española del Corazón (FEC).
Esta iniciativa, bajo el nombre de ‘Nueva Vida Alimentaria’, “que quiere apoyar a la población desde la ciencia para desarrollar una alimentación correcta, variada y equilibrada que le ayude a superar los desajustes que ha provocado el confinamiento de los últimos meses“.
Asimismo, los expertos concluyeron que es necesario regularizar y protocolizar las relaciones entre las sociedades médicas, científicas, profesionales y el sector productor de alimentos.