La diabetes tipo 2, una enfermedad crónica que por lo general sufren los adultos con malos hábitos alimenticios, entre otras causas, está haciendo mella ahora en niños obesos que ingieren habitualmente un exceso de carbohidratos fritos o cargados de grasas

Papas fritas, empanadas, pasteles y rosquillas forman parte de un menú infantil que se vuelve dañino si se consume con frecuencia y que contiene calorías que son difíciles de quemar cuando los pequeños comensales son, además, sedentarios.
“Estamos viendo diabetes tipo 2 hasta en niños de 5 años de edad”, explica la endocrinóloga y vicepresidenta de la Fundación Amigos contra la Diabetes de Venezuela, Marinés Silva.
La especialista señala que, aunque no es frecuente que estos casos lleguen a los consultorios de los endocrinólogos, el hecho de que estén apareciendo estos pacientes es una señal de alerta pues hay un incremento mundial de la enfermedad en América Latina, África y Asia.
La diabetes es una enfermedad crónica que surge cuando el páncreas no produce la suficiente cantidad de insulina para mantener los niveles normales de azúcar en la sangre y los síntomas visibles suelen aparecer cuando ya la afección ha avanzado generando ceguera, pérdida de miembros inferiores o causando infartos.
El endocrinólogo y presidente de la Fundación Amigos contra la Diabetes de Venezuela (FADI), Armando Pérez Monteverde, considera que “desgraciadamente” la diabetes tipo 2 está llegando a los niños y adolescentes “por obesidad”.
“Un adolescente que a los 14 años desarrolla diabetes por obesidad tiene riesgo a tener complicaciones cardiovasculares. Si no se resuelve su problema en ese momento, cuando tiene 25 años ya puede tener el primer infarto”, apunta Pérez Monteverde.
Por su parte, el endocrinólogo Freddy Febres, presidente de las organizaciones venezolanas Funda Diabetes e Instituto de Prevención Cardiometabólica (IPCAM), afirma que los niños obesos que desarrollan diabetes tipo 2 no solo son una realidad, sino que se estima que este problema evolucionará entre la población más pobre.
“Las proteínas son muy caras, la gente come chatarra que ahora es lo más barato y pura harina”, constata Febres, quien señala que los niños del tercer mundo, además de comer exceso de carbohidratos, son sedentarios porque los padres prefieren mantener a los hijos en las casas para evitar que sean víctimas de la violencia.
“La diabetes va a crear una crisis en todos los países del tercer mundo donde va a vivir el 80 % de los afectados”, asegura el experto.
El endocrinólogo comenta que los especialistas de Funda Diabetes atienden unos 1.200 diabéticos mensuales entre los cuales hay cada vez más gente joven “con diabetes avanzada”, aunque no especificó en qué porcentaje.
“El gordito que tiene diabetes puede pasar de 8 a 10 años diabético sin que sus padres se den cuenta y el diagnóstico se da por una complicación o por casualidad”, advierte Febres y señala que el hecho de que la enfermedad evolucione de forma silenciosa la hace más peligrosa que la diabetes tipo 1 que presenta síntomas de forma casi inmediata.
Febres comenta, además, que el IPCAM realizó un estudio de tres años que acaba de culminar y cuyos resultados aún no han sido publicados en el que se confirma que 89 % de las personas con diabetes tipo 2 tienen “enfermedad cardiovascular oculta”.
El especialista indica que una persona que está en la etapa previa a la diabetes o “prediabiabetes” tiene el doble de posibilidad de sufrir enfermedades cardiovasculares que una sana, y que quien ya tiene diabetes tiene cuatro veces más riesgo de padecer este tipo de afección.