Se trata de una iniciativa dirigida a pacientes y profesionales sanitarios centrada en la formación, comunicación y sensibilidad sobre el tratamiento del dolor

Nace en España el Instituto Mundipharma
  • 24 de septiembre, 2012
  • MADRID/EFE

Con el objetivo de dar una respuesta a los pacientes que sufren dolor crónico, más de cinco millones en España, el laboratorio farmacéutico español Mundipharma ha creado el Instituto Mundipharma.

Este Instituto, informa Mundipharma,  será un lugar en el que compartir formación e información sobre el impacto social y económico del dolor crónico, su abordaje y las dinámicas culturales de aceptación que dificultan su diagnóstico y tratamiento.

Como señala, su director, José Ramón Cisneros. “Esta iniciativa nace con el objetivo fundamental de contribuir a mejorar la calidad de vida de los pacientes. Para ello el Instituto Mundipharma destinará trabajo, ilusión y recursos que nos permitirán llevar a cabo proyectos e iniciativas de concienciación y sensibilización desde la máxima transparencia, eficacia y calidad”.

El nacimiento del Instituto Mundipharma cobrará una especial relevancia para aquellos que tienen que afrontar el tratamiento de pacientes con dolor crónico y se enfrentan al sufrimiento que el círculo vicioso del dolor puede provocar, como aislamiento y depresión.

Ayudar a concienciar sobre la situación de pacientes con dolor crónico

En colaboración con profesionales, grupos de pacientes y otras organizaciones, el Instituto aspira a convertirse en un centro de referencia en el que se aborde el desarrollo de programas preventivos que ayuden a concienciar sobre la situación de los pacientes con dolor crónico y se les ofrezcan beneficios significativos en su vida.

La Dra. Concepción Pérez Hernández,  Coordinadora del Proyecto Aula del Dolor musculoesquelético (una de las iniciativas del Instituto) y Jefa de Servicio de la Unidad del Dolor del Hospital Universitario de La Princesa en Madrid nos comenta:  “Gran parte de su difícil manejo radica en dos pilares: uno es la falta de formación en el adecuado tratamiento del dolor, aspecto que es deficitario desde el pregrado, y el otro la falta de una visión multidisciplinar en su abordaje”.