Ignacio López Goñi es doctor en Biología y Catedrático de Microbiología en la Universidad de Navarra. En una entrevista con EFEsalud defiende la importancia de vacunar a los niños porque es “la época más vulnerable” para padecer enfermedades infecciosas y añade que no hacerlo es una irresponsabilidad social porque, de “que tú te vacunes, depende la salud del otro”

Dr. López Goñi: ” Las vacunas en niños son totalmente esenciales”
Un niño recibe una vacuna. EFE/Javier Roibás Veiga
  • 24 de junio, 2016
  • MADRID/EFE/ROSA GALLARDO

El doctor Ignacio López Goñi interviene hoy en la “I Jornadas científico divulgativas de la ciudad de Ávila” realizadas en el Auditorio de San Francisco, con una conferencia titulada ¿Cómo funcionan las vacunas? ¿Por qué hay que vacunarse?

En la conversación con EFEsalud explica por qué es tan necesario estar vacunado y realiza algunas consideraciones sobre los “movimientos antivacunas”.

¿Por qué hay que vacunarse?

Porque las vacunas nos protegen de enfermedades infecciosas y el problema es su propio éxito. Es decir, gracias a su efectividad cada vez hay menos enfermedades y existe la falsa sensación de que no hace falta vacunarse.

En los países en los que disminuye la cobertura vacunal (la cantidad de personas que se vacunan) vuelven a resurgir estas enfermedades infecciosas y muchas son graves e incluso mortales. En Europa hay algunos brotes infecciosos de sarampión y está relacionado con una disminución en la cobertura vacunal.

Dr. Ignacio López Goñi/ Foto cedida por él.
Dr. Ignacio López Goñi/ Foto cedida por él.
¿Cómo funcionan las vacunas?

Las vacunas estimulan las defensas para que cuando se encuentre con el microorganismo patógeno que produce la enfermedad, tenga ya las defensas preparadas. Por eso las vacunas pueden ser microorganismos muertos o debilitados que son capaces de estimular tu sistema inmune para activarlo de manera rápida.

¿Cómo está la legalidad respecto a la vacunación?  ¿Qué les pasa a los padres que deciden no vacunar a sus hijos?

La vacunación no es obligatoria por ley pero es una irresponsabilidad, no solo con los hijos sino con el resto de la ciudadanía. Las vacunas tienen un componente social, de que tú te vacunes depende la salud del otro.

Hay que tener en cuenta que hay personas que por razones médicas no es conveniente que se vacunen y el resto de la sociedad los protegen si estamos vacunados. La vacuna rompe la cadena de transmisión del virus, es una especie de cinturón sanitario que pones alrededor de ese niño.

La situación es distinta cuando hay un brote epidémico porque se aplican unas condiciones legales excepcionales. Si por ejemplo se extiende el sarampión, se obliga a la vacunación por razón de sanidad pública.

Actualmente hay bastante polémica sobre las vacunas en niños ¿Vacunas si o no en niños?

Por supuesto que sí. La vacunación no es obligatoria pero son recomendables porque son un bien social. Las vacunas en niños son totalmente esenciales, la cantidad de enfermedades infecciosas que puede padecer un niño es enorme porque es la época más vulnerable y sus sistemas inmunes aún se están desarrollando.

Se da la paradoja de que en algunos países en vías de desarrollo, hay familias que andan cientos de kilómetros y pagan lo que sea para vacunar a sus hijos contra esas enfermedades, porque ven la muerte de cerca. Y en otras zonas del planeta, donde sobra la abundancia, como por ejemplo en California, hay unos movimientos antivacunas muy activos e incluso hay barrios donde la cobertura vacunal es menor que en los países en vías de desarrollo. Es una contradicción.

¿Por qué esos movimientos antivacunas?

Estos movimientos son más comunes en países anglosajones, en España no hay gran actividad, es más por dejadez o por falta de información. En EEUU hay corrientes asociadas a la ola del ecologismo y a la idea de que todo lo natural es mucho mejor. Piensan que los efectos secundarios de las vacunas no compensan la vacunación, cuando es al revés. Siempre es mejor la vacuna que padecer la enfermedad que protege.

¿Qué efectos secundarios nos puede causar?
Vacuna. EFE/J.J. Guillén
Vacuna. EFE/J.J. Guillén
  • Lo más normal son los efectos secundarios leves que se dan porque la vacuna funciona. Es normal que haya a veces unas décimas de fiebre, cierto malestar, enrojecimiento de la zona y en algunos casos incluso pequeños síntomas de la propia enfermedad. Cada persona puede responder de distinta manera, por eso siempre la vacunación tiene que estar recomendada por tu médico de cabecera que es quien conoce tu historial.
  • En casos muy esporádicos, 1 o 2 por millón de vacunados, puede haber algún problema serio de rechazo a la vacuna. A nivel poblacional, son casos menores. Esto es lo que la sociedad tiene que valorar, si quieren que haya 200 mil casos de polio, o 1 o 2 casos de reacción vacunal fuerte.
La vacuna contra el Zika ya pasa a pruebas en humanos, la del Ébola ya ha sido probada ¿Encontraremos la cura del cáncer?

Es distinto, porque el cáncer no es una enfermedad, es un conjunto de enfermedades. Es cierto que las líneas de investigación van hacia la inmunoterapia, con vacunas inmunológicas que intentan estimular tu sistema inmune para que, en vez de matar al microorganismo, vaya directo la célula cancerosa.

Esto está en plena ebullición, habrá que seguir esperando, pero yo soy optimista. Creo que llegaremos a tratamientos más específicos basados en la estimulación del sistema inmune contra determinados cánceres muy concretos.

Ya existe la vacuna que previene el cáncer de útero ¿Cómo funciona y a quién está dirigida?

Se previene atacando al virus del papiloma. El ejemplo más claro son las verrugas. Son papilomas que entran en las células de la piel y la descontrolan. Dan la orden de que se multiplique el virus y eso forma una verruga.

Algunos papilomavirus producen eso en el cuello del útero. Son tumores que se reproducen sin control y provocan el cáncer de cuello de útero.

La vacuna se ha hecho con algunas proteínas del virus, que te las inyectan y te produce una respuesta inmune contra ese virus. Con los años se ha ido mejorando, porque hay muchos tipos de papilomas. Esta vacuna se administra sobre todo a niñas adolescentes, aunque también a niños, entre 12 y 14 años.

Vacunas. EFE/GEORGE FREY
Vacunas. EFE/GEORGE FREY
¿Las vacunas homeopáticas son fiables?

La base de la homeopatía es diluir en agua un principio activo cientos de miles de millones de veces. Defienden que el agua adquiere una memoria de las moléculas que tiene y produce una serie de efectos. Esto obviamente no tiene efectos secundarios porque simplemente es agua, en muchos casos con un poquito de azúcar.

El problema es que están vendiendo aire y humo a unos precios desorbitados a veces. La gente que dice que les da resultado, les beneficia como lo hace el efecto placebo. En definitiva te están vendiendo agua con azúcar y eso no funciona, no es ciencia.