Trae de cabeza a las madres y es un clásico en el arranque del curso: los piojos reaparecen con la vuelta al cole. La higiene tiene poco que ver con el contagio así que recordamos las armas que tenemos para combatirlos y presentamos algunas novedades para ello

Guerra a los piojos
EFE/Instituto Mathildenhohe
  • 1 de octubre, 2013
  • MADRID/EFE/MARIOLA AGUJETAS

La pediculosis o infestación por piojos no causa trastornos graves pero sí resulta muy molesta y tiene una gran capacidad de contagio, lo que la convierte en uno de los problemas de salud más frecuentes entre la población escolar.

El contagio puede realizarse bien mediante contacto directo (con individuos infectados) o bien mediante contacto indirecto (peines, sombreros, cintas para el pelo…) tal y como nos explica Consuelo Giménez Pardo, profesora Titular de Parasitología en la Universidad de Alcalá: “se trata de la parasitosis mas frecuente en niños y adolescentes en edad escolar fundamentalmente por la manera que tienen de comportarse y de relacionarse entre ellos, la cual implica mayor proximidad y contacto”.

Los piojos se alimentan de sangre varias veces al día y viven cerca del cuero cabelludo para mantener su temperatura corporal. “El signo de la presencia de piojos lo marca el que las personas con pediculosis, muchas veces, notan una sensación de desplazamiento entre el cabello. La sintomatología se presenta con prurito ocasionado por la irritación que produce la saliva del piojo, que puede ser especialmente intenso si se es alérgico a las picaduras”, afirma Giménez.

Prevenir y repeler

Si notamos picores, lo primero es revisar el pelo con detalle. Para ello, lo más conveniente es recurrir a una lendrera, un peine de púas metálicas muy juntas, con el que podremos peinar cada mechón y arrastrar liendres o piojos. “Se recomienda humedecer el cabello, ya que en este entorno los piojos se mueven más lentamente, y colocar un paño blanco sobre los hombros del niño, para poder ver los piojos cuando caigan. En el caso de pelos rizados, también es útil un tratamiento acondicionador o una mascarilla que nos facilite la tarea”, afirma la doctora Aurora Garre, asesora médica de Laboratorios Cinfa.

A partir de ahí, y si se confirma la presencia de piojos vivos en la cabeza, hay que aplicar un tratamiento pediculicida.

No obstante, Aurora Garre insiste en que estos tratamientos deben utilizarse únicamente en casos de infestación: “si no hay piojos, no tiene sentido aplicar un pediculicida, ya que no tiene efecto preventivo y, usado de este modo, podría terminar generando resistencias. Para estos casos, existen repelentes específicos”.

Diez consejos para decir adiós a los piojos:

1. Utilizar repelentes de piojos para mantenerlos a distancia. Existen productos repelentes específicos que podemos usar para evitar la infestación por piojos.

2. No compartir prendas que tengan contacto con el pelo. Los piojos no vuelan ni saltan, tan sólo caminan. Por tanto, si evitamos el contacto directo entre cabezas y no compartimos peines, diademas, gorros, bufandas, etc, evitaremos el contagio.

3. Revisar el cabello de toda la familia. Si se detectan piojos en el colegio o la familia, o se percibe picor en el cuero cabelludo, es muy importante revisar con detalle el pelo de todos los miembros de la familia. En periodo escolar, se recomienda supervisar a los niños todas las semanas.

4. La lendrera, amiga inseparable. Es imprescindible para revisar el cabello mechón a mechón.

5. Que no quede ni una liendre. Además de los piojos, también hay que eliminar sus huevos o liendres, ya que de lo contrario, al cabo de unos días eclosionan. Podemos encontrarlos sobre todo en la zona del flequillo, tras las orejas y en la nuca, ya que en estas áreas más cálidas es donde más se desarrollan.

6. Consultar con el farmacéutico. En caso de encontrar piojos, debemos consultar al farmacéutico el tratamiento más adecuado para eliminarlos. Existen champús, lociones o espumas pediculicidas.

7. Aplicar el tratamiento sobre el cabello seco. Puesto que el agua podría diluir su eficacia, los tratamientos deben aplicarse en seco, masajeando la zona ligeramente, y de acuerdo a las inst rucciones indicadas por el fabricante y el farmacéutico.

8. Nada de secadores de aire caliente. Tras aplicar tratamientos pediculicidas, no deben utilizarse secadores de pelo de aire caliente, puesto que el calor inactiva el efecto insecticida residual.

9. Lavar las prendas a más de 60ºC. La ropa, sábanas y toallas de las personas infestadas deberán lavarse a temperatura superior a 60ºC y planchar bien las costuras, ya que los piojos no resisten el calor. Los peines y artículos de pelo pueden limpiarse con un pediculicida.

10. Aislar y aspirar. Los objetos que no puedan lavarse (por ejemplo, los peluches) deben introducirse en una bolsa cerrada durante tres días: puesto que los piojos se alimentan cada 4-6 horas de la sangre del huésped, no pueden vivir tanto tiempo aislados y morirán. Posteriormente, conviene aspirar estos objetos, así como los sofás, asientos y colchones.

Novedades del mercado

Guerra a los piojos
Foto cedida por Laboratorios Cinfa

El laboratorio Cinfa cuenta con una gama de productos antipiojos que, bajo la marca Goibi, ofrece champú, loción, espuma y un repelente de piojos que actúa como barrera protectora para ahuyentar a los piojos y evitar el contagio. Además acaba de lanzar su tratamiento Locion Nature sin insecticidas, cuya formulación lo hace apto para niños a partir de un año y para pieles sensibles.

Gracias a su mecanismo de acción mecánico, evita que los piojos se adapten al producto, por lo que no genera resistencias. Elimina piojos y liendres en una sola aplicación de diez minutos.

Guerra a los piojos
Foto cedida por Nitview-Ledcom

Otra novedad del mercado es Nitview Ledcomb, un producto que nos ayuda en la localización y extracción efectiva y mecánica de piojos y liendres, minimizando el uso de productos químicos pelicudicidas y reduciendo las infestaciones posteriores.

Su inventor se llama Carlos Albadalejo; realizador y productor de televisión, conocedor del mundo de la luz y esto fue precisamente lo que le llevó a aplicar este mundo a su invento.

Nitview Ledcomb tiene un dispositivo de luz, con una longitud de onda específica, que permite que la quitina de los piojos y las liendres se ilumine, facilitando así su localización. Además incluye un peine de púas microacanaladas que facilitan la extracción de forma eficaz.