El Ministerio de Sanidad y las comunidades autónomas han acordado un protocolo común para hacer frente a la ablación, por el que se exigirá a las familias africanas que renuncien a someter a sus hijas a esta práctica cuando viajen a sus países de origen

El Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS) aprobó el pasado miércoles esta decisión. El ministro de Sanidad, Alfonso Alonso, estimó que en España hay aproximadamente 17.000 niñas en riesgo de sufrir esta práctica y proceden de alguno de los 29 países donde se realiza “esta atrocidad”.
Un compromiso preventivo
El protocolo aprobado, explicó el ministro, establecerá que las familias africanas que hacen viajes a sus países en los que se mutilan los genitales de las niñas y mujeres firmen un “compromiso preventivo” antes del desplazamiento y un control posterior.
Alonso ha indicado que algunas comunidades autónomas ya contaban con un protocolo específico para hacer frente a la mutilación genital femenina.
Asimismo, ha asegurado que el protocolo “ayuda a avanzar” en la erradicación de esa práctica y proporcionará las herramientas necesarias a los profesionales sanitarios para prevenirla.
Según el Ministerio, sólo otros ocho países en Europa cuentan con un protocolo similar.