El Plan de vacunación contra la COVID-19 empezará, en enero, en las residencias de mayores, con los residentes y personal sanitario. También en esta primera fase se vacunará a sanitarios y personas con discapacidad. La vacuna será voluntaria y gratuita, ha informado el ministro de Sanidad, Salvador Illa, quien ha dicho que este primer grupo es el más vulnerable

Las vacunaciones contra la COVID-19 empezarán en enero en residencias de mayores
La ministra portavoz, María Jesús Montero (c), el ministro de Sanidad, Salvador Illa (d), y el ministro de Justicia, Juan Carlos Campo, comparecen en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. EFE/ J.J. Guillén

El Consejo de Ministros ha aprobado el Plan de vacunación contra el coronavirus que ha presentado Illa.

Se trata de una estrategia común de carácter estatal en el marco europeo, en la que han participado las comunidades autónomas, sociedades médicas y expertos de diferentes áreas y disciplinas, entre ellos matemáticos y sociólogos.

Los dos objetivos del Plan son:

  • Ayudar a controlar la mortalidad generada por el virus, que en lo que va de año y según las cifras oficiales supera las 43.000 muertes, así como reducir que la población española enferme por el SARS-CoV-2.
  • Fijar un listado para empezar a vacunar en el mismo momento que se empiecen a recibir las dosis, lo que está previsto en enero próximo.

El Plan ordena la prioridad de los grupos a vacunar, prepara los aspectos logísticos de la distribución y administración de vacunas, prevé el seguimiento de las vacunaciones mediante un registro específico, y establece una estrategia de comunicación dirigida tanto al personal sanitario como a la población general.

Se crean 18 grupos poblaciones para efectuar la vacunación en función de criterios de riesgo en la afectación por el virus.

La prioridad de estos grupos se sustenta en principios como igualdad, equidad, dignidad, necesidad, beneficio social, ética y solidaridad.

Hay tres etapas en estas prioridades, ha explicado el ministro Salvador Illa.

  • La primera etapa comenzará en enero, en cuanto lleguen las primeras dosis, y se extenderá hasta marzo. Se vacunará a todo el personal de residencias de mayores, tanto internos como empleados; al personal sanitario general; y a personas con discapacidad. Unos 2,5 millones de personas. Los más vulnerables al virus, ha dicho Illa.
  • La segunda etapa se extenderá en el segundo trimestre de 2021 de manera progresiva para seguir vacunando a grupos prioritarios que el ministro no ha especificado.
  • La tercera etapa, a partir de julio, pretende llegar al 100 por 100 de la población a lo largo de todo 2021.

140 millones de dosis

España tiene previsto acceder a 140 millones de dosis, lo que permitiría inmunizar a 80 millones de personas (dos dosis por vacuna), una cifra que supera al total de la población española.

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El ministro de Sanidad, Salvador Illa, comparece en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros este martes en Madrid. EFE/ J.J. Guillén

"Todas las vacunas tendrán el mismo nivel de seguridad", ha afirmado el ministro, quien ha señalado que la vacuna COVID-19 será la número 15 del calendario vacunal.

Illa ha señalado los altos índices de vacunación general que se registran en España, y que en el caso de la vacunación infantil alcanza el 95 por ciento.

La vacuna: mejor, voluntaria

"Creemos que los resultados serán mejores si la vacunación es voluntaria", ha valorado el ministro de Sanidad.

Si en un año en España se vacunan unos 10 millones de personas, en lo que va de año esa cifra alcanza los 14 millones, ha añadido Illa.

"El sistema nacional de salud está preparado para administrar las vacunas COVID-19. Haremos el seguimiento y evaluación de las personas que reciben la vacuna. Habrá un plan farmacológico y de control de la segunda dosis. Vamos a monitorizar la eficacia y efectividad de la vacuna", ha subrayo Salvador Illa.

"La pandemia evoluciona de forma correcta, pero la incidencia acumulada, ahora por debajo de 400 casos por cada 100.000 habitantes, "sigue siendo muy alta, y en Navidad no hay que bajar la guardia".

Respecto a las medidas de convivencia en Navidad, que mañana debate el Consejo Interterritorial de Salud en base a un borrador elaborado por el Gobierno, y su control por parte de las autoridades, Illa ha dicho: "La principal herramienta que tenemos para que las cosas vayan bien es la responsabilidad de los ciudadanos, que siga siendo ejemplar".

El ministro ha agregado que el objetivo es alcanzar consenso con las CCAA sobre las recomendaciones para las fiestas navideñas.

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