Científicos de la Universidad Pablo de Olavide (UPO) de Sevilla y del Instituto de Neurociencias de Alicante (CSIC) han descifrado nuevas claves para explicar los mecanismos que emplea el cerebro para generar recuerdos que perduren en el tiempo

Este trabajo, publicado en la revista Journal of Neuroscience, demuestra que un incremento controlado de la actividad de la proteína CREB, uno de los responsables de la expresión de genes relacionados con el aprendizaje y la memoria, aumenta en el cerebro el fenómeno de potenciación a largo plazo.
Se trata de la primera vez que se realiza este estudio en animales durante el momento de aprendizaje, según ha destacado un comunicado de la universidad sevillana.
El estudio parte del consenso científico de que la potenciación a largo plazo -conocida internacionalmente como long-term potentiation (LTP, por sus siglas en inglés)- se basa en un aumento duradero de la comunicación sináptica entre dos neuronas y constituye el sustrato físico de la memoria.
Los investigadores españoles han confirmado en este trabajo el papel de la proteína CREB como reguladora de la plasticidad neuronal y de la LTP, es decir, de la capacidad de las neuronas para cambiar la fuerza de sus conexiones con otras neuronas en respuesta a estímulos externos, favoreciendo así los procesos de aprendizaje y memoria.
En este trabajo también ha destacado que la activación de la CREB favorece el proceso de aprendizaje, aunque si se mantiene alta por un tiempo excesivo termina por interferir con el mismo.
Para alcanzar estas conclusiones, este grupo de científicos, dirigidos en la UPO por los profesores José María Delgado y Agnés Gruart, de la División de Neurociencias, han confirmado una importante novedad en este método de trabajo, según el comunicado.
Frente a los estudios existentes, basados en experimentos realizados en tejido cerebral aislado, este trabajo de los científicos españoles se ha realizado en animales y en el momento en que se encuentran aprendiendo una prueba selectiva de aprendizaje.