La diabetes, y en particular la diabetes mellitus tipo 2 (DM2), es la primera causa de insuficiencia renal terminal y, a su vez, la enfermedad renal es una de las complicaciones más relevantes que dificultan el control de la diabetes

Enfermedad renal y diabetes: de cenicienta a protagonista
Muestras de sangre para conocer los niveles de azúcar/FOTO
  • 28 de enero, 2019
  • MADRID/EFE/PILAR GONZÁLEZ MORENO

Se puede decir que hasta hace poco el manejo de la enfermedad renal en la diabetes era una cenicienta, pero actualmente se ha abierto un nuevo escenario que la convierte en protagonista.

Y no hay que olvidar que cerca de un 40% de las personas con diabetes tendrán, en algún momento de la evolución de su enfermedad, algún tipo de nefropatía o enfermedad renal crónica.

La estrecha relación entre ambas dolencias, diabetes y enfermedad renal, acarrea “importantes consecuencias clínicas, económicas y sociales”.

Además, se ha evidenciado que las personas con DM2 y enfermedad renal “tienen un mayor riesgo cardiovascular y un peor pronóstico vital”.

Así lo ha puesto de manifiesto el Grupo Clínico y Traslacional en Diabetes (Grupo CTD), coordinado por los doctores Esteban Jódar (Jefe de Departamento de Endocrinología y Nutrición Clínica en QuironSalud, Madrid); Francisco Javier Ampudia-Blasco (Servicio de Endocrinología y Nutrición del Hospital Clínico Universitario de Valencia); y Rafael Simó (Jefe de la Unidad de Investigación en Diabetes y Metabolismo del Institut de Recerca Hospital Universitari Vall d’Hebron, Barcelona).

El grupo, creado con una beca de Mundipharma, reúne a otros 11 expertos en diabetes de 5 especialidades: Cardiología, Endocronología y Nutrición, Medicina Familiar y Comunitaria, Medicina Interna y Nefrología.

En un encuentro con los medios, los especialistas citados han explicado que en general, las personas con nefropatía diabética, dependiendo del estadio de su enfermedad, requieren tratamientos complejos para el control de trastornos tales como la hiperglucemia, la hipertensión arterial o la hiperlipidemia.

José Luis Górriz, nefrólogo del Hospital Clínico de Valencia

Vulnerables a la hipoglucemia

Pero no todas las opciones terapéuticas para el tratamiento de estas enfermedades se pueden utilizar en estos pacientes.

De acuerdo con el doctor Ampudia-Blasco, “en algunos casos, hay que reducir dosis para adaptarlas al filtrado glomerular decreciente y, en otros, simplemente suspender el tratamiento vigente y cambiarlo por otro más apropiado”.

También estos pacientes son más vulnerables a las hipoglucemias, por lo que adaptar el tratamiento insulínico en estos casos es una tarea compleja.

enfermedad renal y diabetess
Coordinadores del GRUPO CTD

Es por ello que para los coordinadores del Grupo CTD es fundamental concienciar sobre la importancia de la detección de la enfermedad renal en todas las personas con diabetes.

Poner en valor el control metabólico de la diabetes en fases precoces, así como el control de los factores de riesgo cardiovascular.

Enfermedad renal y diabetes: cenicienta que fue

Para el doctor José Luis Górriz, del Servicio de Nefrología del Hospital Clínico Universitario de Valencia, la enfermedad renal ha sido “la cenicienta” ya que hasta hace pocos años no se habían logrado importantes beneficios en el pronóstico de estos pacientes.

Pero recientes estudios apuntan la posibilidad de cambiar la evolución natural con nuevos tratamientos.

En palabras de Górriz, “nunca, en casi ninguna patología renal de tanta prevalencia como la enfermedad renal diabética, se han registrado tantos avances como en los últimos 4-5 años.

A su juicio se ha pasado de ser casi meros espectadores de la progresión de la enfermedad con escasas herramientas terapéuticas a disponer de recursos nuevos y de mayor eficacia.

Pero el paciente también debe ayudar a su mejoría, reducción de sal,  dejar de fumar y hacer ejercicio físico, son, en palabras de este médico, el “triunvirato clave” para mejorar.

Un problema de salud prioritario

El Grupo CTD se ha planteado abordar como primer tema monográfico la afectación renal en la diabetes porque es un problema de salud “de primer orden, de carácter multidisciplinar y que representa una morbilidad muy importante para el paciente y una alta carga para el Sistema Nacional de Salud”, según el médico Javier Ampudia-Blasco.

Se pretende poner el foco en la repercusión renal de la diabetes y se discutirá sobre cómo la propia afectación renal condiciona el riesgo cardiovascular y el tratamiento que recibe el paciente diabético.

enfermedad renal y diabetes
Nueva tecnología de marcapasos para el corazón. EFE/Handout

Los especialistas citados han defendido la importancia de un “abordaje holístico” con el objetivo final de ofrecer  “recomendaciones claras, actuales y basadas en evidencia clínica” que puedan transferirse a la comunidad científica y a la sociedad en general.

El riesgo cardiovascular

La enfermedad renal es frecuente en la DM2, pero no aparece y evoluciona de la misma forma en todos los casos.

Es por ello que para el doctor Ampudia-Blasco, “las personas con diabetes tipo 2 y enfermedad renal presentan un riesgo cardiovascular elevado, similar a los pacientes con enfermedad cardiovascular establecida, de forma que seleccionar fármacos que retarden la progresión de la enfermedad renal y que reduzcan el riesgo cardiovascular es una prioridad”.

Se estima que 1 de cada 4  (25 %) personas con DM2 presentará albuminuria a los 10 años del diagnóstico de la diabetes.

Además, 1 de cada 3 pacientes diabéticos en el mundo (un 28%) documentan algún grado de nefropatía.

Y el 40 % de los diabéticos presentarán nefropatía a lo largo de su evolución.

Datos de la OMS

Datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) sobre la diabetes en general

  • El número de personas con diabetes ha aumentado de 108 millones en 1980 a 422 millones en 2014
  • La prevalencia mundial de la diabetes* en adultos (mayores de 18 años) ha aumentado del 4,7% en 1980 al 8,5% en 2014
  • La prevalencia de la diabetes ha aumentado con mayor rapidez en los países de ingresos medianos y bajos.
  • La diabetes es una importante causa de ceguera, insuficiencia renal, infarto de miocardio, accidente cerebrovascular y amputación de los miembros inferiores.
  • Se estima que en 2015 la diabetes fue la causa directa de 1,6 millones de muertes.
  • Otros 2,2 millones de muertes fueron atribuibles a la hiperglucemia en 2012.
  • Aproximadamente la mitad de las muertes atribuibles a la hiperglucemia tienen lugar antes de los 70 años de edad.
  • Según proyecciones de esta organización, la diabetes será la séptima causa de mortalidad en 2030