Las personas albinas son extremadamente vulnerables a los efectos del sol en su piel, especialmente en África, donde el cáncer de piel, las persecuciones y la discriminación son los principales peligros para este colectivo. Mafalda Soto, emprendedora, ha desarrollado una crema protectora que se produce y distribuye en Tanzania, fomentando también la educación y la integración de los albinos en este país

Una crema solar protege y educa a los albinos en Tanzania
EFE/Orlando Barría
  • 26 de agosto, 2016
  • Ana María Belinchón

Las personas con albinismo sufren una alteración genética que les impide producir melanina en cantidades correctas, por lo que carecen de pigmento en ojos, piel y pelo.

En los países desarrollados, los albinos tienen unas expectativas de vida normales, a pesar de los problemas oculares y de que deben protegerse especialmente del sol para evitar quemaduras graves y cáncer de piel.

Sin embargo, en África subsahariana padecer esta alteración en los genes cuesta la vida a 9 de cada 10 albinos que no llegan a cumplir los 30 años. Al cáncer de piel se une una fuerte discriminación social hacia este colectivo, perseguido brutalmente para comercializar sus miembros y utilizarlos en rituales de magia negra.

Una crema gratuita e informativa

Mafalda Soto, licenciada en Farmacia y máster en Medicina Tropical, ha creado una crema solar protectora, “Kilisun”, especialmente diseñada para personas con albinismo en África subsahariana, donde el riesgo de padecer cáncer de piel es extremadamente alto.

“A día de hoy distribuimos de manera regular a 2.500 personas con un 84% de adherencia y contamos con el apoyo de diferentes partners, desde UNICEF hasta la International Foundation for Dermatology”, señala Soto.

“Kilisun” se produce localmente y se distribuye gratuitamente en Kilimanjaro (Tanzania) a través de clínicas móviles (en partenariado con otras ONG), de médicos de hospitales públicos y privados y de colegios especiales, ya que muchos niños albinos viven internados por motivos de seguridad.

Durante la distribución, se proporciona información sobre albinismo y protección solar a los usuarios y familiares, fomentando su integración. Además, la contratación de personas albinas fomenta la inclusión socioeconómica de este colectivo.

El sol es el mayor peligro para los albinos en Tanzania. Imagen del Kilimanjaro. EPA/GERNOT HENSEL
El sol es el mayor peligro para los albinos en Tanzania. Imagen del Kilimanjaro. EPA/GERNOT HENSEL

“Uno de nuestros objetivos -afirma la emprendedora- es que el Ministerio de Salud de Tanzania compre el producto acabado, lo que permitiría la sostenibilidad y, al mismo tiempo, la posibilidad de expandirnos a otros países africanos con las mismas necesidades”.

También la creación de una línea solar en Europa orientada a pieles sensibles es otra de las estrategias para apoyar las operaciones de producción, distribución y educación en África.

Emprender en salud

Kilisun es uno de los seis proyectos seleccionados en Emprende in Health, una iniciativa social impulsada por la compañía farmacéutica Lilly y la fundación UnLtd que apoya el emprendimiento social en el sector salud. Se trata de un programa que busca valor compartido y en el que la colaboración permite que el beneficio sea bidireccional, generando un impacto positivo en la sociedad.

Esto ha supuesto un salto cualitativo y cuantitativo en la idea de Mafalda Soto, que ahora cuenta con la atención personalizada de un mentor que, entre otras herramientas, le proporciona apoyo legal para registrar su proyecto en Tanzania y en España.

Gracias a esta iniciativa, un total de seis emprendedores (empresas start-up) con ideas innovadoras en el ámbito de la salud están recibiendo formación, asesoramiento, mentoring y networking durante un periodo de diez meses, junto con un capital semilla de 5.000 euros.

Saúl Becerril, jefe regional de ventas (Oncología) de Lilly y mentor de Emprende in Health, afirma que “el objetivo es que los emprendedores consigan la infraestructura y las aptitudes necesarias para desarrollar su proyecto hasta las últimas consecuencias”.

Para él, emprender en salud “es difícil porque se trata de un entorno muy inestable, competitivo y cambiante y, en muchas ocasiones, lo que hay es una absoluta incertidumbre por delante”.