La crisis económica que produce incertidumbre laboral, recortes y la necesidad de tomar decisiones cada vez más difíciles también ha comenzado a afectar la salud de los empresarios españoles: un 50% sufre estrés y un 79% está preocupado por sus consecuencias, según el Instituto Nacional de Estadística (INE)

“El estrés se configura como uno de los principales trastornos a vencer por parte del empresariado español”, afirma Carlos Martínez, profesor y director de IMF Business School.
Este trastorno aparece cuando las exigencias del entorno laboral superan la capacidad de las personas para hacerles frente o mantenerlas bajo control, tal y como explica el Instituto Nacional de Seguridad e Higiene en el Trabajo (INSHT) en un documento disponible en su sitio web.
Aunque no se considera una enfermedad, el INSHT informa que el estrés intenso y continuado puede perjudicar la salud física y mental y acarrear consecuencias como enfermedades cardíacas, gastrointestinales y musculoesqueléticas, así como producir ansiedad y depresión.
Las cifras del estrés
Se estima que 40 millones de europeos están estresados, lo que genera costes de 20.000 millones de euros, según un comunicado de IMF Business School.
Esta escuela de negocios también recoge los resultados de la encuesta de Grant Thornton Internacional Business Report, que revela que “los ejecutivos españoles son los sextos más estresados del mundo y los segundos de Europa, precedidos por los griegos”.
Entre los síntomas más generalizados de los ejecutivos locales, según apunta el Ministerio de Sanidad, destacan los problemas de sueño, nerviosismo, dificultad para concentrarse, agotamiento, náuseas y palpitaciones.
Además, según la Asociación Española de Especialistas en Medicina de Trabajo tan solo el 26% de las empresas han adoptado medidas para reducir el estrés entre sus empleados.
Recomendaciones
El profesor Carlos Martínez asegura que “es fundamental tener conocimientos básicos para evitar el estrés”, que se ha intensificado en el siglo XXI por el actual modelo competitivo.
Este experto agrega que es crucial “aprender a relativizar los problemas, conocerse a uno mismo, reconocer las reacciones ante el estrés laboral, respirar adecuadamente y abarcar tan solo aquello que podemos hacer”.
El INSHT también brinda consejos para prevenir este trastorno:
- Controlar la carga laboral porque tanto un exceso de trabajo como la poca actividad pueden convertirse en fuentes de estrés.
- Planificar el trabajo teniendo en cuenta los imprevistos y las tareas extras y sin prolongar en exceso el horario laboral.
- Facilitar descripciones claras de las tareas a los colaboradores, porque el desconocimiento se traduce en una sensación de incertidumbre y amenaza.
- Fomentar la participación y la comunicación en la empresa a través de los canales más idóneos.