En España consumimos un 13% de calorías menos diarias que hace 40 años, pero no nos privamos de las grasas que afectan a los índices de sobrepeso y obesidad. Sedentarismo y un descenso de los hidratos de carbono nos alejan de la dieta mediterránea

Los españoles consumen menos calorías que hace 40 años
Los hábitos alimenticios de los españoles se alejan de la dieta mediterránea. EFE/Alberto Morante
  • 23 de enero, 2014
  • MADRID/EFE/ANA SOTERAS

El cambio que han sufrido los patrones de alimentación en España en las últimas cuatro décadas nos distancia  de la tradicional dieta mediterránea influyendo en la obesidad y en una vida más sedentaria.

Según datos de la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad, el 24 % de los hombres; el 21% de las mujeres y el 14 % de niños y adolescentes sufre obesidad hoy en día en España.

Sin embargo, la ingesta media de energía ha pasado de 3.008 kilocalorías por persona al día  en 1964 frente a las 2.609 de 2012, según el análisis científico “La dieta española: una actualización”, elaborado por el profesor Gregorio Varela-Moreiras, catedrático de Nutrición y Bromatología de la Universidad CEU San Pablo.

Los españoles consumen más calorías que hace 40 años

Este experto destaca que “resulta excesivo para el conjunto de la población española adulta estudiada el aporte de lípidos, desequilibrando el perfil calórico, principal índice de calidad de la dieta. No obstante, la calidad de la grasa es todavía razonablemente satisfactoria, toda vez que la contribución de los ácidos grasos monoinsaturados es positiva, si bien deberíamos reducir el aporte de grasa saturada”, señala en un comunicado difundido hoy.

Actualmente, la contribución de los diferentes grupos de alimentos a la ingesta total diaria de energía es de: cereales (24,6%), carnes y derivados (14,3%), aceites y grasas (13,6%) y leche y sus derivados (12,5%), seguidos a mucha distancia de los pescados y mariscos (3%), las bebidas no alcohólicas (2,9%) o las bebidas alcohólicas (2,3%).

Una sociedad sedentaria

Pero, según los expertos, actualmente no sólo hemos reducido el número de calorías diarias, sino también la actividad física.

Según datos de la última Encuesta Nacional de Salud, “cuatro de cada diez personas (41,3%) se declara sedentaria (no realiza actividad física alguna en su tiempo libre). Uno de cada tres hombres (35,9%) y casi una de cada dos mujeres (46,6%)”.

A este respecto, el profesor Varela señala que “a pesar de haber reducido la ingesta de calorías en nuestra dieta, no somos capaces de tener un balance equilibrado, ya que nuestro gasto energético debido a nuestro estilo de vida inactivo es muy inferior al deseable. Y desde luego, si reducimos de manera continuada la ingesta de energía, podemos tener dificultados para incluir en esa menor cantidad de energía las vitaminas y minerales necesarios. Si, por el contrario, aumentamos el gasto energético, también nos va a permitir una mayor ingesta de calorías acompañadas de los micronutrientes necesarios”.

Esto es aún más importante teniendo en cuenta que el sedentarismo y la inactividad física no sólo se asocian con el sobrepeso y la obesidad, sino con otras patologías (hipertensión arterial, colesterol elevado, triglicéridos, diabetes, ciertos tipos de cáncer, etc.), mientras que por el contrario, una vida físicamente activa produce numerosos beneficios para la salud y disminuye el riesgo de mortalidad por enfermedades cardiovasculares. 

Los aspectos contemplados en el análisis “La dieta española: una actualización” forma parte del documento de consenso “Obesidad y Sedentarismo en el Siglo XXI: ¿qué se puede y se debe hacer?”,  presentado en septiembre de 2013.

Se trata de un acuerdo histórico sobre el abordaje multidisciplinar de la obesidad, fruto del trabajo conjunto de más de treinta de los principales profesionales de nuestro país en materia de nutrición, bioquímica y biología molecular, nutrigenómica, inmunonutrición, endocrinología, epidemiología, pediatría, atención primaria, control clínico y hospitalario, salud pública, educación, ciencias de la actividad física y del deporte y medicina del deporte.